Las empresas de medicina prepaga preparan un nuevo incremento a partir de abril debido a un nuevo impuesto que dispuso el gobierno actual. Las subas estarían cerca del 20%.
La medida se tomará pese a las diversas cautelares que rigen contra el DNU de Javier Milei. Según el decreto, los beneficiarios deben poder elegir con total libertad por una prepaga o una obra social, pero impulsando la libre competencia entre los distintos actores del sistema. ¿El resultado? Incrementos que hacen cada vez más inviable la posibilidad de una prepaga.
Este nuevo aumento, retroactivo, se debe a que el DNU además crea un nuevo impuesto del 20% sobre los adicionales que paga un trabajador por un plan. Ese dinero recaudado estará destinado al Fondo Solidario de Redistribución (FSR), el cual garantiza la cobertura del Plan Médico Obligatorio (PMO). Esto es las prestaciones mínimas a todos los afiliados del sistema. Además, compensa costos extraordinarios por prestaciones especiales o tratamientos complejos.
Actualmente, las obras sociales sindicales (OSS) aportan un 15% al FSR. La diferencia radica en que ahora las prepagas también deberán hacer su aporte, del 20%. Desde las compañías privadas de salud cuestionan la iniciativa, ya que el numero impactará en la cuota de los socios, poniendo en riesgo la continuidad de los afiliados en los distintos planes.
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