Javier Milei consideró que impedir manejar a alguien que consumió alcohol «está mal» porque es «cercenar la libertad de los individuos». El diputado liberal sostuvo que «el problema no es si tomás o no alcohol», sino que después «se paguen los costos».
Las frases del diputado nacional fueron en respuesta al ser consultado en un programa televisivo sobre los proyectos de “alcohol cero al conducir”. Allí dejó ver su postura en un contexto donde la mayoría de los accidentes de tránsito son por exceso de velocidad y por conducir bajo los efectos del alcohol.
La postura del político de La Libertad Avanza es que el tema tiene que ver más con «pagar los costos que generás» si querés «hacer boludeces». Es decir, solo actuar si hay consecuencias evitando cualquier tipo de prevención previa.
Según la Asociación Civil Luchemos por la Vida, en Argentina hay un promedio de casi 21 muertes diarias en accidentes de tránsito en los últimos 25 años. «En casi la mitad de los muertos en el tránsito, especialmente entre los jóvenes, está presente el alcohol«, aclara la agrupación.
En el 2020 ese promedio fue más bajo con 14 muertes diarias. Esto no fue por una mejora en la seguridad vial, se debió a la menor circulación vehicular por las restricciones derivadas de la pandemia.
Para finalizar su argumento, Milei utilizó una comparación tirada de los pelos muy alejada de lo que tiene que ver con el alcohol al volante. «La Ley Seca no terminó bien en Estados Unidos porque la tuvieron que abolir«, lanzó el libertario.
Allí fue cuando opinó que «al final lo persiguieron a Al Capone injustamente», en referencia a uno de los gánsters más sanguinarios del país del norte al que se le atribuyen alrededor de 300 asesinatos.