Mientras el Gobierno celebra una suba marginal en las ventas de supermercados, los datos más preocupantes vienen del sector mayorista. En abril, las operaciones en autoservicios de venta al por mayor se desplomaron un 3,2% respecto al mes anterior, y un 2,9% en la comparación interanual. El retroceso marca un nuevo golpe para uno de los canales más sensibles del consumo popular, que abastece tanto a pequeños comerciantes como a familias que compran por volumen para abaratar costos.
De acuerdo al informe difundido este miércoles por el INDEC, las ventas en mayoristas siguen en caída libre: si se compara contra abril de 2023, el descenso en términos reales alcanza el 17,7%. En ese mismo período, los supermercados mostraron un avance del 0,5%, que no alcanza a revertir la contracción acumulada ni a frenar la pérdida de poder adquisitivo de los hogares.
El deterioro del consumo mayorista también se refleja en la composición de las compras. Apenas dos rubros —ropa y carne— lograron escapar de la baja, mientras que frutas, verduras y lácteos experimentaron caídas significativas. La pérdida de peso de los productos frescos revela un deterioro en la calidad de la alimentación, al tiempo que muchos consumidores ajustan sus hábitos para priorizar precio sobre variedad o valor nutricional.
En cuanto a las formas de pago, los métodos digitales ganan terreno. Los llamados “otros medios de pago” —como billeteras virtuales y códigos QR— fueron los únicos que mostraron una mejora interanual y ya explican cerca del 30% de las operaciones. Esto evidencia un cambio en los hábitos de compra, aunque no alcanza para disimular la magnitud del retroceso.
Desde el sector comercial advierten que, si bien el consumo de bienes durables (como electrodomésticos y motos) mostró cierto repunte, los alimentos siguen en picada. Daniel Schteingart, director de Planificación Productiva de Fundar, planteó que “parte del consumo de alimentos se viene desplazando hace rato del supermercado a otros canales (alimentos preparados, delivery, dietéticas, entre otros)”, lo que explicaría la fragmentación del consumo y la caída en grandes bocas de expendio.
About Author
Te puede interesar también...
-
Bentia Energy: la empresa de Iguacel que se quedó con un negocio millonario de YPF
-
El Gobierno, preocupado porque se van los dólares de las empresas extranjeras
-
Paro total en Molinos: denuncian despidos masivos y precarización laboral
-
Caputo acelera el endeudamiento: emite bonos por más de $6,5 billones
-
Las provincias desestiman el verso de la inflación