El Fondo Monetario Internacional (FMI) emitió un llamado al gobierno de Javier Milei para que refuerce la asistencia social y evite que el ajuste fiscal impacte de manera desproporcionada en los salarios, jubilaciones y en los sectores más vulnerables de la población. La portavoz del organismo, Julie Kozack, destacó la importancia de medidas rápidas de políticas públicas en Argentina, señalando que aunque ha habido progresos, el camino hacia la estabilización económica sigue siendo desafiante.
En una conferencia de prensa desde Washington, Kozack subrayó que proteger a los más vulnerables es fundamental para evitar que el peso del ajuste recaiga en las familias pobres y trabajadoras. Destacó los avances en la consolidación fiscal y en la contención de la emisión monetaria, que están dando resultados palpables con la disminución de la inflación. Sin embargo, enfatizó que es crucial garantizar asistencia social adicional y preservar el valor real de las pensiones, dada la delicada situación social y las altas tasas de pobreza en el país.
El FMI también hizo hincapié en la implementación de un ambicioso plan de estabilización para corregir los retrasos de políticas de los últimos trimestres de 2023. Este plan se centra en el establecimiento de un ancla fiscal sólida, políticas para reducir la inflación de manera sostenida, reconstruir las reservas y abordar las distorsiones que obstaculizan el crecimiento económico.
Sobre la posibilidad de un nuevo programa entre Argentina y el FMI, Kozack no proporcionó detalles específicos, señalando que en este momento el enfoque del organismo es apoyar las políticas destinadas a restablecer la estabilidad macroeconómica en el país.
Este llamado del FMI refleja una preocupación recurrente respecto a que el ajuste no recaiga excesivamente sobre los trabajadores y jubilados. En ese sentido, la subdirectora gerente del FMI, Gita Gopinath, había expresado preocupaciones similares el mes pasado durante su visita al país, destacando la importancia de proporcionar asistencia social y mantener el valor real de las pensiones.
Si bien el gobierno de Milei ha reconocido la importancia de estas medidas, el FMI sigue insistiendo en la necesidad de frenar la licuación de salarios y jubilaciones, temiendo un posible estallido social que ponga en riesgo las reformas impulsadas. A pesar de la respuesta del presidente Milei, quien aseguró contar con un consenso del 56 por ciento de la población para llevar adelante las reformas, el organismo multilateral insiste en la importancia de ampliar el arco de consensos políticos y fortalecer la ayuda social.
En este contexto, Milei convocó a los gobernadores en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, aunque por el momento son limitados los gestos del presidente destinados a aliviar la tensión con los mandatarios. La decisión sobre cómo abordar estas preocupaciones y avanzar en las reformas económicas queda ahora en manos del gobierno argentino.
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