Jubilados y docentes, los sectores más golpeados en el primer año de Milei

Un informe económico, que salió a la luz en las últimas horas, detalló que ambos sectores fueron los más perjudicados en 2024 en lo que a ingresos respecta.

El primer año del gobierno de Javier Milei dejó un panorama mixto en términos de ingresos para diversos sectores de la economía argentina. Mientras algunos segmentos lograron mantener sus condiciones en comparación con 2023, la mayoría enfrentó una caída en su poder adquisitivo.

Este fenómeno, que se refleja en varios informes económicos, tiene su raíz en la inflación persistente, las fluctuaciones en los tipos de cambio y la disminución del consumo, factores que afectaron negativamente los ingresos de la mayoría de los trabajadores y beneficiarios de programas sociales.

A continuación, se detallan los principales sectores afectados y los que lograron resistir este escenario económico.

Pérdidas generalizadas para la mayoría de los sectores

Según el informe de la economista Laura Caullo, de la Fundación Mediterránea, de una docena de sectores analizados, solo tres lograron cerrar el año con un incremento real en sus ingresos. Estos sectores pudieron sortear la difícil situación económica gracias a ajustes en sus programas o a medidas específicas que mejoraron su poder adquisitivo.

Sin embargo, la mayoría de los sectores se vio afectada negativamente. La caída generalizada en el consumo y la inflación fueron determinantes para este resultado negativo, que se reflejó en los ingresos de los trabajadores, jubilados y beneficiarios de programas como la AUH y la Tarjeta Alimentar.

“De hecho, el balance del primer año deja un panorama desigual en materia de ingresos reales. Algunos sectores lograron avances: la AUH aumentó un 100% y la jubilación media creció un 3%”, señaló Caullo en su informe. Sin embargo, estos aumentos no alcanzaron para contrarrestar las fuertes pérdidas sufridas por otros sectores.

Los sectores más golpeados: docentes y jubilados

Dentro de los sectores más perjudicados durante el primer año de gestión de Milei, los docentes y los jubilados son los que enfrentaron las mayores dificultades. Los trabajadores de la educación, especialmente aquellos que dependen del sector público, vieron cómo sus salarios se deterioraron de manera significativa. En febrero de 2024, los docentes alcanzaron su nivel salarial más bajo, sin lograr una recuperación importante a lo largo del resto del año. Este deterioro no fue exclusivo del ámbito nacional, ya que también afectó a las remuneraciones de los docentes en las provincias.

Caullo destacó que “en el caso de los docentes, fueron los más afectados, alcanzando su nivel más bajo en febrero y sin lograr una recuperación significativa hacia noviembre”, lo que refleja un panorama complicado para este sector clave en la estructura educativa del país.

Otro de los grupos más afectados por la gestión de Milei fue el de los jubilados, especialmente aquellos que cobran el haber mínimo. Según el informe, a pesar de los bonos otorgados por el gobierno, el haber mínimo experimentó una pérdida real del 3% en su poder adquisitivo. Esto se debió en parte a la reducción del gasto público y la revalorización parcial de las pensiones, que no alcanzaron para cubrir el aumento de los precios.

A pesar de que los jubilados con ingresos superiores al haber mínimo empezaron a experimentar una leve recuperación a partir de marzo de 2024, el impacto de la devaluación del 50% en diciembre de 2023 golpeó fuerte en los primeros meses del año, haciendo que la recuperación fuera más lenta para los haberes más bajos. La falta de ajustes más agresivos en los primeros meses generó tensiones en un sector que ya venía golpeado por la inflación y la falta de poder adquisitivo.

Los trabajadores del sector privado: fluctuaciones y resistencias

Los trabajadores registrados en el sector privado fueron uno de los grupos que lograron mantener su poder adquisitivo durante el año, aunque con fluctuaciones significativas a lo largo de 2024. Si bien algunos meses fueron más favorables que otros, los ingresos de este sector se vieron generalmente preservados gracias a los aumentos salariales que fueron negociados en las paritarias, aunque estos no siempre fueron suficientes para superar la inflación.

Este comportamiento de los salarios privados es una de las pocas buenas noticias en un contexto general de pérdida de poder adquisitivo. No obstante, el panorama de los trabajadores informales fue muy diferente. Según el informe de Caullo, el salario informal cayó un 13% en términos reales respecto de fines de 2023, lo que marcó un golpe importante a los trabajadores más vulnerables.

La Tarjeta Alimentar y el programa «Volver al Trabajo»: caídas notorias

Los programas sociales también fueron uno de los principales focos de preocupación durante 2024. La Tarjeta Alimentar, que está dirigida a aquellos sectores más vulnerables, experimentó una caída del 11% en su poder adquisitivo, lo que significó un golpe considerable para las familias que dependen de este beneficio para cubrir sus necesidades alimenticias básicas.

Por otro lado, el programa «Volver al Trabajo», anteriormente conocido como Potenciar Trabajo, fue uno de los sectores más perjudicados en cuanto a ingresos reales. Según los datos de la Fundación Mediterránea, este programa sufrió una drástica caída del 60% en términos reales, lo que afectó gravemente a quienes dependen de este subsidio para mejorar sus condiciones laborales o reinsertarse en el mercado de trabajo.

La perspectiva para 2025: desafíos y oportunidades

El informe de Caullo concluye que, aunque hubo algunos avances en ciertos programas, la situación económica general sigue siendo complicada para la mayoría de los sectores. Las fluctuaciones en los ingresos y la falta de acuerdos salariales en sectores clave, como el docente y el público, continúan siendo una preocupación central.

“El salario informal, según el último registro, muestra una caída del poder de compra del 13% respecto de fines de 2023”, destacó Caullo, señalando que, a pesar de las medidas tomadas, muchos trabajadores siguen perdiendo frente a la inflación.

De cara a 2025, el principal desafío del gobierno será encontrar un equilibrio entre mantener los programas sociales que beneficiaron a algunos sectores y mejorar las condiciones de los trabajadores más vulnerables, en un contexto de inflación y alta incertidumbre económica.

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