Los gurús económicos de siempre tienen una palabra en la punta de la lengua: «presión fiscal«. Dicen que Argentina es uno de los países con mas impuesto del mundo. Esto es falso e incluso si utilizamos sus conceptos, sus propios números los contradicen.
Si hablamos de presión fiscal, Argentina se encuentra recién en el puesto 44, delante de nuestro país se encuentran los principales ejemplos que citan a diario estos economistas. Francia esta primero con un 47,2% y Argentina muy abajo en la tabla con un 28,8%.
Y si vamos a nivel regional encontramos a Brasil y Uruguay con mayor presión tributaria. Mientras Brasil tiene el 33,1%, Uruguay el 29,2% y Argentina el 28,8%.
Un dato interesante es hablar de la tabla de posición de los impuesto a las grandes fortunas en la región. Argentina se encuentra tercero debajo de Uruguay y Colombia. Si, Uruguay en el primer puesto, el oasis de los empresarios y la libertad dicen por ahí.
Los impuestos sirven para construir puentes, cloacas, pagar el ATP en pandemia, el IFE, los bonos a jubilados e informales y redistribuir la riqueza. También para ampliar la capacidad productiva y exportadora de Argentina. Los autopercibidos gurús de siempre van a criticar los impuestos. Por eso hay exigirles que dejen de usar como modelo a los países que tienen mucha más presión impositiva que la nacional.
La fake news de los 164 impuestos de Argentina
Los partidos conservadores sostuvieron que en Argentina ya se cobran un sinfín de impuestos. La lista de los supuestos 164 impuestos que armó el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) forma parte de una cadena de desinformación funcional a la crítica al Estado sin comprender su rol redistribuidor.
Un análisis del CEPA mostró que, al menos, el 65% de los conceptos incluidos no son impuestos. En cambio, se trata de tasas, contribuciones, derechos, fondos, cánones y otras formas de cobro por parte del Estado (en sus diversos niveles) que suelen tener asociada una contraprestación.
Por definición, estas se encuentran acompañadas de contraprestaciones por parte del Estado, y la obligación de pago deriva de la prestación de un servicio. Son considerados tributos, pero no impuestos. En cambio, los impuestos son tributos cuyo cumplimiento no origina una contraprestación directa en favor del contribuyente por parte del Estado. En total, el listado de 164 “impuestos” presenta 41 tasas, 27 derechos y 26 contribuciones.
Además, el listado incluye cánones por concesión de servicios públicos: este es el cobro que realiza el Estado por conceder un área para su explotación. Muy diferente de un impuesto. Abarcan también el Aporte Extraordinario de Grandes Fortunas, que se produjo por única vez y no forma parte del sistema tributario habitual. Sumado a esto, incluyen dentro del listado Fondos (8 en total) que en muchos casos se financian con impuestos ya existentes.
Por otra parte, realizan una operación muy común por parte de la mirada liberal argentina: incorporar a los aportes que realizan las y los trabajadores al sistema de seguridad social, y también las contribuciones patronales como parte de la carga tributaria, cuando se trata de la financiación del Sistema de Seguridad Social de carácter solidario e intergeneracional. La misma práctica realizan con el Régimen de Trabajadoras de Casas Particulares, o de Autónomos.
Por último, deliberadamente en el listado duplican algunos conceptos, por ejemplo, Ganancias aparece dos veces: como ganancias a las sociedades y a las personas físicas. La ley de Impuesto a las Ganancias es una sola y ni siquiera tiene dos sino cuatro categorías.
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