Bullrich, acorralada por reclamos, ofreció viviendas de un plan que el Gobierno dio de baja

Este lunes, en la localidad salteña de Aguas Blancas, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se encontró en una situación inesperada tras un reclamo urgente de un padre que le pidió ayuda para su hijo, quien trabaja en la Gendarmería. El hombre, visiblemente angustiado, le explicó que su hijo «no tiene para comer» con un salario mensual de 750 mil pesos, de los cuales destina 450 mil al alquiler. En un contexto de alta inflación y fuerte crisis económica, la ministra intentó calmar al padre con un gesto que sorprendió a todos los presentes: prometió viviendas del plan Procrear, un programa que el Gobierno de Javier Milei eliminó a finales del año pasado.

Este hecho ocurrió después de que Bullrich y el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, inauguraran el “Sitio Seguro para Víctimas de Trata”, una valla de 200 metros de largo destinada a dificultar el cruce fronterizo con Bolivia. El acto estuvo marcado por la puesta en marcha del controversial “Plan Güemes”, que busca reforzar la presencia de Gendarmería en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, el plan también generó polémica, ya que algunos operativos, como el ocurrido en diciembre pasado, derivaron en hechos de violencia, como la muerte de Fernando Martín Gómez, un joven de 27 años, en un enfrentamiento con la Gendarmería.

Tras la inauguración, un hombre se acercó a la ministra con la difícil situación de su hijo, un cabo de Gendarmería que, a pesar de tener un salario de 750 mil pesos, enfrenta enormes dificultades para cubrir sus gastos básicos, como el alquiler. Según los datos oficiales, en diciembre del año pasado, un cabo primero que cobraba 778.238 pesos en noviembre, vio un aumento de tan solo 1% en su salario, lo que significó un incremento de 7.782 pesos, alcanzando los 786.020 pesos mensuales. Sin embargo, este aumento resulta insuficiente para muchos efectivos, especialmente en un contexto económico que se caracteriza por la inflación y los altos costos de vida.

Frente a la desesperación del padre, Bullrich intentó consolarlo con palabras de aliento, asegurando que el Gobierno estaba «haciendo un esfuerzo enorme» para mejorar la situación de los gendarmes. «Yo le juro que en la medida que el país vaya creciendo los vamos a ir mejorando, téngame confianza, estoy con ustedes», manifestó la funcionaria. Sin embargo, lejos de tranquilizar al hombre, la ministra le ofreció algo que resultó todavía más llamativo: “Son viviendas para ustedes, les vamos a dar viviendas”, le dijo, sugiriendo que se accedería a casas del plan Procrear.

Este comentario generó sorpresa y dudas, ya que el mismo Gobierno que Bullrich representa fue el encargado de eliminar el Procrear en noviembre de 2024, a través del Decreto 1018/2024. El programa, creado en 2012 y suspendido en 2018 para ser relanzado en 2020, brindaba acceso a viviendas y terrenos para familias de clase media y baja, especialmente aquellas con situaciones de vulnerabilidad o riesgo.

En paralelo a esta situación en Salta, familias de gendarmes y miembros de otras fuerzas de seguridad se manifestaron en distintos puntos del país, como el Edificio Centinela en el Puerto de Buenos Aires y el Monumento a la Bandera en Rosario. En las protestas, exigieron mejores salarios y condiciones laborales, considerando que, a pesar de la importancia de su trabajo en la seguridad pública, los efectivos no están recibiendo el reconocimiento económico adecuado. De hecho, en varios lugares del país, los reclamos llegaron a ser parte de una movilización más amplia por los derechos de los trabajadores de las fuerzas de seguridad.

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