El último dato del INDEC mostró una caída real de los salarios del 18%. En este contexto, el ministro de Economía, Luis Caputo, no quiere homologar la paritaria del gremio de camioneros. Y es que acordaron un aumento del 25% para el sueldo de marzo y 20% en abril.
“La paritaria tiene que tener una lógica», aseguró el ministro. Y agregó: «Las paritarias son libres, pero la Secretaría de Trabajo funciona como regulador, tiene que homologarlas. ¿Por qué homologar algo que no tiene ningún sentido? Sería generarse un problema propio».
En este marco, el último informe salarial del INDEC asegura que el problema está en las remuneraciones, sobre todo del sector público. Al compararse con los precios, a nivel interanual, los salarios en enero subieron 191,5%, pero los precios un 254,2%. Así, quedaron 62,7 p.p por debajo del IPC en el mismo período.
El director de Economía en el centro de investigación Fundar, Guido Zack, analizó la situación y en diálogo con el medio Ámbito Financiero, dijo: “Utilizar los salarios como ancla inflacionaria es totalmente consistente”, pero se trata de “la peor manera de bajar la inflación” ya que “afecta al crecimiento, distribución de los ingresos y la pobreza”.
Según el experto, el Gobierno quiere estabilizar “a cómo dé lugar, caiga quién caiga”, sin medir “cuánto tiempo y en qué magnitud se mantendrá sin amenazar la sostenibilidad del programa”.
Zack también analizó el discurso del Gobierno. Al principio, el presidente Javier Milei dijo que las paritarias “deben seguir siendo libres”. Sin embargo, cuatro meses después, Caputo quiere establecer un límite.
“No hay intención de sentar a sindicatos o cámaras empresarias para intentar moderar el efecto de la devaluación, la puja distributiva e inercia inflacionaria”, advirtió. Y reflexionó: “Es llamativo porque en sus propios términos, la política de ingresos no tiene costo fiscal”.