Con la tuya: Milei gastó más de $80 millones en hoteles de lujo

En su primer año de gobierno, Javier Milei viajó más al exterior que a las provincias argentinas y, en cada destino, eligió hospedajes de lujo. Según documentos oficiales, la Presidencia destinó más de 80 millones de pesos en hoteles de cuatro y cinco estrellas durante sus giras internacionales. Mientras el mandatario insiste en que «no hay plata», sus noches en exclusivos alojamientos fueron financiadas con fondos públicos.

Milei realizó 19 viajes internacionales en 2024 y pasó 63 días fuera del país, lo que lo convierte en el presidente con más giras en su primer año desde la recuperación democrática. La información sobre sus hospedajes surge de un pedido de acceso a la información pública. Aunque los gastos en hoteles representan solo una parte del costo total de sus viajes –que, según el ministro del Interior, Guillermo Francos, ascendió a 2.600 millones de pesos–, el contraste con su discurso de austeridad no pasa desapercibido.

Alojamiento premium con fondos estatales

El primer indicio de que la «austeridad» pregonada en campaña no se reflejaría en la gestión se dio en enero de 2024, cuando Milei viajó al Foro Económico de Davos. Para esa gira, el Gobierno desembolsó más de 10 millones de pesos en el Steigenberger Icon Grandhotel, un cinco estrellas con piscina climatizada y vista a los Alpes.

Algo similar ocurrió en Roma, donde el presidente eligió el Intercontinental Ambasciatori Palace, con tarifas de 630 mil pesos por noche. Lo llamativo es que en la capital italiana existe una residencia oficial argentina, utilizada por otros mandatarios y diplomáticos, pero en este caso fue descartada con el argumento de que «no funcionaba el aire acondicionado».

Actos partidarios con fondos públicos

Los gastos en hospedaje no se limitaron a viajes oficiales. En mayo, Milei viajó a España para participar en un acto de Vox, sin reuniones con funcionarios locales ni con la realeza. Aunque la embajada argentina reconoció que se trataba de una «visita privada», el mandatario y su equipo se alojaron en el Hyatt de Madrid, donde cada noche cuesta unos 350 mil pesos.

En febrero, Milei también asistió a la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) en Washington. Se hospedó en el Gaylord National Resort & Convention Center, con vista al río Potomac, y la factura oficial marcó un gasto de 1.475.231 pesos, un monto menor al valor real de las tarifas del hotel.

En julio, el presidente optó por un evento de la CPAC en Brasil en lugar de una cumbre del Mercosur. Junto a su comitiva, se alojó en el Hotel Mercure de Camboriú, donde también se encontraba el expresidente Jair Bolsonaro.

¿Quién paga la cuenta?

En algunos casos, los gastos de hospedaje no fueron cubiertos por el Estado argentino, lo que despertó dudas sobre quién los financió y a cambio de qué. Durante su visita a Israel, Milei se alojó en el King David Hotel con todos los costos cubiertos por el gobierno de Benjamin Netanyahu. Poco después, anunció su intención de trasladar la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén, lo que generó especulaciones sobre un posible vínculo entre ambos hechos.

Lo mismo ocurrió en Miami, donde el presidente descansó en el Grand Beach Hotel sin que la factura pasara por las arcas públicas. Hasta el momento, no se informó quién pagó la estadía ni bajo qué condiciones.

Milei repite que «no hay almuerzos gratis». A juzgar por sus viajes, parece que las estadías en hoteles de lujo tampoco lo son.

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