El ministro de Economía, Luis Caputo, presentó ayer nuevas iniciativas para “remonetizar” la economía argentina, asegurando que se tomarán medidas en las próximas dos semanas para aumentar la circulación de dólares. La anunciada «remonetización» viene a reforzar los esfuerzos del Gobierno para reactivar el crecimiento económico, aunque Caputo no detalló cómo afectarán estos anuncios a la vida cotidiana de los argentinos.
En su discurso en Expo EFI 2025, Caputo subrayó que la economía argentina está preparada para crecer «más del 6%», pero que para lograrlo es necesario aumentar los recursos monetarios en circulación. “Necesitamos que esta monetización se materialice para que la economía siga creciendo”, sostuvo, dejando entrever que las decisiones vendrán en breve para incentivar el uso de los dólares.
Según Caputo, “habrá más dólares y van a circular más dólares” en el mercado, aunque no especificó qué tipo de medidas se adoptarán para estimular esta circulación. Esta intervención busca poner fin a la escasez de dinero que actualmente afecta la economía local, al tiempo que intenta mantener un nivel controlado de inflación. En ese sentido, remarcó que las medidas no se limitarán a generar más recursos, sino a darles mayor fluidez para que impacten en la actividad económica.
El ministro también defendió una polémica decisión del Gobierno de transferir utilidades del Banco Central al Tesoro, una medida que había sido cuestionada por economistas. «Son utilidades genuinas producto de la baja del riesgo país», explicó Caputo. Sin embargo, insistió en que los recursos no se destinarán al gasto público, sino que serán utilizados exclusivamente para cancelar deuda, caso no se logre refinanciar la totalidad de los pasivos en pesos.
Caputo se mostró optimista respecto a la reducción de costos a nivel local. En sus palabras, “la baja del costo argentino no viene más por devaluaciones. La baja viene por cuatro factores: seguir bajando impuestos, desregulando, abrir la competencia y desde el sector privado hay que volver a invertir”. Sin embargo, no especificó si estos cambios traerían efectos inmediatos en los precios al consumidor.
En cuanto a la reforma previsional, que es parte de las reformas estructurales exigidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), Caputo confirmó que se implementará en algún momento del futuro. Sin embargo, la fecha sigue siendo incierta. El ministro sostuvo que el “timing” para la puesta en marcha de la reforma dependerá de lo que decida el presidente Javier Milei, aunque sí adelantó que se llevará a cabo tras otras reformas fiscales y laborales. La reforma previsional fue acordada con el FMI para fines de 2026, pero el Gobierno aún no ha confirmado si cumplirá con esta fecha.
Caputo no dio detalles de cómo la reforma afectará a los jubilados, aunque reiteró que se encuentra dentro de los planes del Ejecutivo. A pesar de ello, la incertidumbre sobre el alcance de estas reformas sigue generando dudas entre los sectores más vulnerables de la economía.
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