16 de diciembre de 2025

En menos de cuatro meses del 2026, Milei dejó a 49 mil personas en la calle

El retroceso laboral se extiende a casi todo el país y expone el impacto del ajuste económico sobre sectores clave de la producción.

El mercado de trabajo formal en el sector privado continúa en terreno negativo bajo la administración de Javier Milei. Entre junio y septiembre de 2025, la cantidad de puestos registrados mostró una pérdida acumulada de 49 mil empleos, de acuerdo con cifras oficiales del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).

Durante ese período, el empleo privado presentó bajas consecutivas del orden del 0,2% mensual, una dinámica que profundizó el deterioro del entramado productivo. En septiembre, el total de trabajadores asalariados del sector privado se ubicó en «6,198 millones de personas», un nivel que refleja el impacto sostenido de las políticas económicas de corte ultraliberal.

Solo en el noveno mes del año, la caída mensual alcanzó el 0,2% respecto de agosto, lo que se tradujo en 10.600 puestos menos. El dato confirmó el quiebre del virtual estancamiento que dominó los primeros meses de 2025, cuando el empleo osciló con leves subas y bajas, pero sin lograr recuperar los registros de diciembre de 2024.

El relevamiento sectorial de septiembre expuso un escenario dispar, aunque con mayoría de resultados negativos. Según el informe oficial, existió «heterogeneidad en el desempeño de los sectores económicos«, con seis actividades que redujeron su dotación de personal. Las mayores contracciones se concentraron en «Explotación de minas y canteras (-0,7%); Industrias manufactureras (-0,4%); Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (- 0,3%); Transporte, almacenamiento y comunicaciones (-0,3); Comercio y reparaciones (-0,2%) y Construcción (-0,2%)».

En contraposición, solo tres rubros lograron mostrar mejoras: Pesca (+3,5%), Suministro de electricidad, gas y agua (+0,1%) y Enseñanza (+0,1%), aunque con un peso reducido dentro del total del empleo privado registrado.

La comparación interanual tampoco ofreció señales alentadoras. Frente a septiembre del año anterior, el empleo asalariado privado mantuvo un «balance negativo (-0,4%, 25,9 mil trabajadores menos)», lo que confirma que la caída no responde a un fenómeno aislado, sino a una tendencia persistente.

En el plano territorial, el deterioro se replicó en gran parte del país. Durante septiembre, la reducción del empleo se manifestó «de manera generalizada a nivel provincial». Diecisiete de las veinticuatro jurisdicciones registraron descensos, con fuertes impactos en «Tierra del Fuego (-1,2%), Misiones (-1,2%), Corrientes (- 1,0%) y Mendoza (-0,7%)». Apenas siete provincias exhibieron variaciones positivas, encabezadas por Chubut (+1,0%), Catamarca (+0,4%) y Santiago del Estero (+0,3%).

El cuadro general refuerza las críticas a la estrategia económica del Gobierno, que mientras prioriza el ajuste fiscal y la desregulación, deja como saldo un mercado laboral cada vez más debilitado y con menor capacidad de absorción de empleo formal.

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